Un día como hoy pero de 1992 el zurdo matancero arribo a las 200 victorias en Clásicos nacionales.
Jorge Luis Valdés, conocido como “Tati”, es ampliamente considerado uno de los mejores lanzadores zurdos en la historia del béisbol cubano. Su carrera está llena de logros impresionantes que respaldan esta afirmación.
Valdés participó en 20 Series Nacionales, acumulando un récord de 234 victorias, lo que fue un récord durante casi dos décadas. Su capacidad para mantener un alto nivel de rendimiento durante tanto tiempo es un testimonio de su habilidad y dedicación.
En el ámbito internacional, Valdés fue igualmente dominante. Fue campeón olímpico en 1992 y ganó múltiples campeonatos mundiales y copas intercontinentales. En estos eventos, ganó 16 partidos sin sufrir una sola derrota. Este nivel de éxito en competencias internacionales subraya su capacidad para sobresalir en los escenarios más grandes.
Valdés era conocido por su dominio del ‘knuckleball’, un lanzamiento difícil de controlar pero extremadamente efectivo cuando se ejecuta correctamente. Esta habilidad técnica le permitió destacarse entre sus pares y ser una amenaza constante para los bateadores.
Además de sus estadísticas impresionantes, Valdés tuvo un impacto significativo en el juego. Su no-hitter contra Villa Clara en 1984 es uno de los momentos más memorables de su carrera. También fue un pilar en los equipos que representó, contribuyendo decisivamente a los títulos y subcampeonatos de su equipo, Henequeneros.
En su carrera “Tati”, acumuló un total de 2,519 ponches durante su carrera en la Serie Nacional de Béisbol de Cuba. Este impresionante número de ponches es un testimonio de su habilidad para dominar a los bateadores y su longevidad en el deporte
En resumen, la combinación de su consistencia, éxito internacional, habilidades técnicas y su impacto en el juego hacen de Jorge Luis Valdés una figura legendaria en el béisbol cubano.